lunes, 17 de noviembre de 2014




Mi hija y yo paseábamos a mis perros, miré hacia un carro que estaba estacionado, raro porque conozco todos los autos de esa calle y ese no lo había visto. Estaba un sr ya mayor, pero con un porte muy distinguido, se parecía tanto a mi padre que casi me roba lágrimas, le dije a mi hija que mirara discretamente y ella al momento me dijo " es igualito a mi abuelito, ve mamá y dícelo  ".
El sr nos vio y cerró la ventanilla, ante eso dudé en ir, pero ya las lágrimas corrían, así que me acerqué, el sr tardó en bajar el vidrio como dudando hacerlo, cuando lo hizo le dije que disculpara el atrevimiento pero que eran tan parecido a mi padre que quería decírselo. Hablamos un poco, yo lloraba ante sus palabras, el también lo hizo agradeciendo que me acercara y me dijo algo que su madre siempre le dijo. Me dio su nombre y su mano en un fuerte apretón, le dije mi nombre y me alejé, al momento se retiró. 
No se quien sea, nunca lo había visto pero me sentí feliz de ver en el a mi padre. 

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